Los seguros de protección de pagos no son más que productos financieros asociados a préstamos de cualquier tipo que sirven para garantizar el pago de los mismos en situaciones puntuales de pérdidas de ingresos por parte del titular del préstamo, como pueden ser las situaciones causadas por una incapacidad temporal, por un accidente o enfermedad, por una situación de desempleo o, incluso, por fallecimiento. Por otro lado, el coste derivado del seguro corre a cargo del titular del préstamo.
1# Cómo se utilizan
Para entender mejor el concepto de seguro de protección de pagos lo mejor es verlo con un ejemplo, y lo haremos sobre el préstamo por antonomasia, como es el préstamo hipotecario, principal fuente de endeudamiento de las familias españolas y sobre los que se constituyen la gran mayoría de los seguros de protección de pagos de hipoteca, ya que el esfuerzo financiero de las familias para pagar la hipoteca supera, en muchos casos, el 60% de su renta disponible.
Entonces, para garantizar el pago de las cuotas en caso de una falta de ingresos temporal, se constituyen estos seguros de protección de pagos que cubrirán siempre a los titulares que generan ingresos. Si imaginamos una familia en la que el marido es taxista, por ejemplo, y la mujer ama de casa, se asegurarían los ingresos del taxista, ya que hay multitud de circunstancias que pueden provocar su falta de ingresos, como, por ejemplo, un accidente, y no a la ama de casa, porque no tendría sentido, generaría un coste para los titulares sin contraprestaciones reales en forma monetaria. Hay que tener en cuenta, por otro lado, que estos seguros de protección de pagos son diferentes a los seguros de vida tradicionales, ya que estos segundos no protegen ante pérdidas temporales de ingresos.
2# Aspectos a tener en cuenta
- Duración: Hay que tener mucho cuidado porque algunas entidades establecen un período máximo de validez del seguro de protección de pagos de unos 5 años. Es importante, porque este seguro de tan corta duración acaba por no cumplir con sus objetivos, por lo que hay que asegurarse de que la duración del seguro de protección de pagos es igual al del préstamo que se toma, o, al menos, que puede ser renovable.
- Requisitos: Como no puede ser de otra manera, para poder firmar un seguro de protección de pagos las entidades financieras exigen un certificado médico, así como disponer de fuentes de ingresos demostrables, normalmente un contrato fijo o bien contrato como autónomo.
- Límite de pago: Cada entidad financiera establece el número de meses que cubrirá el seguro de protección de pagos, pudiendo ser, por ejemplo, 12 meses, 18 meses, etc. Durante este período de tiempo el titular del préstamo está cubierto, aún cuando no disponga de ningún ingreso.
3# Coste
La prima suele ser única, pagándose por adelantado para toda la duración del seguro, como hemos dicho anteriormente, para unos 5 años. El importe de la prima de este seguro suele oscilar entre el 1% y el 1,5% del total del capital prestado. Sin embargo, a medida que se han ido generalizando y abriéndose a otros productos financieros de manera más habitual, se ha ido popularizando, a su vez, las primas mensuales, de manera que son más cómodas para el titular del préstamo.
En definitiva, los seguros de protección de pagos son una garantía para el titular del préstamo y para la propia entidad financiera de que las cuotas mensuales de devolución se abonarán, aún cuando pueda surgir una interrupción temporal de las percepciones de ingresos por parte del titular.
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